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febrero 2016
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concepto de hombre. Una educación que no parta de
la realidad del sujeto no sirve. Un educador que no se
comprometa personalmente con sus alumnos, informará
más no educará. Un sistema educativo que no confronte a
sus miembros y promueva el choque de conciencias, estará
condenado a entretener. Un alumno que no se interese
por su propia educación, formación, situación social, se
perderá en el vacío existencial.
Fomentar el eros (deseo de plenitud), el compromiso y la
comprensión humana, significará que se está respondiendo
al llamado a la trascendencia, que se ha encontrado y
asumido el elemento soteriológico de la educación, el cual
ofrece respuestas a las preguntas últimas del hombre y
permite la idea de sentido que lo salvará del nihilismo. Es
necesario y urgente. Si se condena al ser humano y a la
sociedad a aceptar todo lo que pasa a su alrededor de
forma pasiva, lo único que se obtendrá será la repetición de
los errores del pasado y una nula esperanza para el futuro.